Cursos de capacitación ministerial. Unos cuantos ofrecidos en esta Web. De texto completo. Imágenes-diapositivas para la proyección digital.

Clases bíblicas. Gran cantidad de Guías, Textos para maestros y material in PowerPoint en esta Web.

Sermones. Más de ciento cuarenta en esta Web. De texto completo, audio, video, PowerPoint.

 

 

2,778 palabras

 

 

¿CAÑA?

¿O COLUMNA?

 

"¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?", pregunta Jesucristo, refiriéndose a Juan el Bautista.

 

"¿Qué salisteis a ver al desierto? 

¿Una caña sacudida por el viento?",

pregunta Jesucristo, refiriéndose a Juan el Bautista.

 

I. Introducción.

A. Salutación. Querido lector, amada lectora, de estas líneas, abunden la gracia y la paz de Dios en usted, orando que este mensaje lo halle edificante.

B. Tema: ¿CAÑA? ¿O COLUMNA? Dos palabras retóricas que representan a dos categorías de personas.

1. ¿Cuál de las dos palabras representa a usted: "CAÑA" o "COLUMNA"? ¿Cuál quiere que le represente? ¿Cuál desea ser en este momento, y durante el resto de su vida en la tierra: ¿CAÑA? ¿O COLUMNA?

a) ¿En qué matas piensa al escuchar el vocablo? No sola la caña de azúcar sino otras especies de plantas pueden ser catalogadas como "CAÑA". Por ejemplo, el papiro. El tallo de este tipo de planta es, casi sin excepción, largo, delgado y poroso, características que lo rinden fácil de doblar o romper. Hasta el viento lo dobla y tuerce.

b) Al escuchar la palabra "COLUMNA", ¿qué visualiza? En el contexto de este mensaje, la columna literal que visualizamos sería, probablemente, la de un templo grande, o de un edificio del gobierno. O sea, se trata de una columna alta, digamos de unos seis metros, y gruesa, con un diámetro en su base de dos metros, hecha de mármol, vertical, fuerte, resistente, bella.

c) Entonces: vuelvo a preguntar: ¿Qué quiere ser: como la caña o como la columna?

2. Nuestro país, en realidad, nuestro mundo entero, está plagado de "caña", de hierba mala, de abrojos y espinas, es decir, de almas delgaditas, desnutridas; de almas como espigas, de almas espinosas. Tal cual la hierba mala de los campos, se multiplican y crecen alarmantemente, en toda institución social, educativa, social y religiosa. Quizás le lastime la palabra "caña" como símbolo retórico de una clase de almas, poniéndole incómodo. No quisiéramos ofender sus sensibilidades sino lograr el crecimiento espiritual de toda persona. El símbolo no fue escogido por este servidor. Se encuentra en el lenguaje del propio Jesucristo, quien siempre está retándonos a mejorarnos, transformarnos, adquirir atributos más fuertes y hermosos. Tal es la naturaleza del evangelio del Señor: un tanto duro en muchas de las enseñanzas, para que nos impacte, haciéndonos cambiar. Pues, no permita, se lo suplico, que "caña" le ofenda. Queremos todos nosotros llegar a ser "columnas", ¿cierto?

a) Refiriéndose a Juan el Bautista, Jesús pregunta a la gente que le rodeaba: "¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?" (Mateo 11:7). ¡Ahí mismo está el vocablo en boca del Señor! Juan no era "caña" sino tremenda "columna", el mayor de todos los profetas. Pero, la gente espiga decía que tenía demonio (Mateo 11:18). Por lo tanto, ella, y no Juan el Bautista, era como la "caña sacudida por el viento".

b) Cristo mismo era la más impresionante "columna" jamás vista en la tierra, una gran torre espiritual, un baluarte impregnable para la verdad divina. Pero, la gente espiga, teniendo características como de "caña", doblada por los vientos encontradas de sus criterios contradictorios, le decía “glotón, bebedor de vino y blasfemador” (Mateo 11:19Juan 10:33).

c) En su mayoría, la "gente caña", por ser pura caña, prefiere ver más caña, asociarse con más caña, ser sacudida como la caña. Sienten placer al observar a la "caña" sacudida por los vientos de los escándalos, meneada y rota por las calientes brisas de pasiones desordenadas, torcida y aplastada por las fuertes ráfagas de tormentas matrimoniales o emocionales. Placer perverso. Fascinación diabólica. En contraste, contemplan con envidia, aun con temor y odio, a las columnas, a las torres, a los baluartes, dispuestos no pocos espíritus chiquitos a hacerles daño o destruirlos, como destruyeron, físicamente, a Juan el Bautista y a Jesucristo.

d) Al salir usted a ver, ¿qué ve en su comunidad, en las escuelas y universidades, en las oficinas y fábricas, en las iglesias? ¿Mucha "caña sacudida por el viento"?

e) Pero, para la estabilidad y preservación de nuestras instituciones sociales y gubernamentales, nos hace falta muchas, muchas columnas fuertes e inconmovibles, tanto damas como caballeros. ¿Qué es usted padre, madre, hijo, hija madura en su hogar? ¿En la sociedad? ¿Caña o columna? ¿Qué es usted soltero, soltera, en la sociedad, en el trabajo? ¿Caña o columna?

f) En cuanto a la iglesia del Señor, y cada congregación en particular, ¡ni hablar! En medio de los torbellinos morales y doctrinales que nos azotan con frecuencia, nuestro hermoso "templo espiritual" quedará intacto solo si contamos con muchas columnas, tanto hermanas como hermanos, sólidas, bien cimentadas, irrompibles. ¿Qué es usted, hermana, hermano, joven, en la iglesia? ¿Caña, hojarasca, madera, o fuerte columna de espiritualidad y de verdades eternas?

 

Se llamaban Jaquín y Boaz las dos grandes columnas que embellecían y fortalecía el templo edificado por el rey Salomón en Jerusalén.

 

Se llamaban Jaquín y Boaz las dos grandes columnas que embellecían y fortalecían el templo edificado por el rey Salomón en Jerusalén.

 

II. ¡Hermosa columna viva, ahora y eternamente!

A. Amado, amada, Dios no nos puso en esta tierra para ser mera "caña". Su designio para todos y cada uno es que seamos hermosas columnas vivas de verticalidad moral en su grandioso templo espiritual.

1. Considere la exhortación y la promesa de Apocalipsis 3:11-13"He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias."

a) Esto mismo es lo que Cristo quiere para usted, y para todo ser humano: ¡convertirle en "columna" y colocarle "en el templo" de Dios en el cielo! Una vez trasladado a aquel fabuloso templo celestial, no querrá usted salir jamás.

b) En las columnas de estructuras levantadas en la tierra, la "gente caña" suele escribir palabras y nombres feos. Transformado usted en columna espiritual y mantenida su verticalidad hasta el fin, Cristo le hará "columna en el templo" de su Dios, escribiendo sobre usted tres nombres poderosos:

(1) …el del propio Dios,

(2) …el de la Nueva Jerusalén y

(3) …su Nombre Nuevo.

2. ¿Quiere usted estas bendiciones inigualables? ¿Que Cristo le haga columna permanente en el templo de Dios? ¿Que le autorice el uso de tres nombres poderosos? Si las rechaza, optando por seguir como "caña sacudida por el viento", sepa que la caña se seca pronto. Secada, la recogen los ángeles, echándola en el fuego del infierno, donde es consumida eternamente.

3. De no ser columna usted en este instante, lógicamente, entre sus más importantes retos es el de transformarse en una, proceso que puede usted iniciar enseguida.

a) El proceso comienza, repudiando usted la imagen para sí mismo de "gente caña" y desear ser "columna".

b) Se somete al proceso de transformación, entregándose por fe a Cristo, confesándolo públicamente como Hijo de Dios y bautizándose en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo (Mateo 28:18"para perdón de los pecados" (Hechos 2:38).

c) Añadido por Cristo a su iglesia (Hechos 2:47), al crecer en conocimiento, inteligencia y sabiduría espiritual, se hace usted de los elementos necesarios para la formación de una columna espiritual fuerte.

d) Desde luego para que Cristo le coloque como columna permanente en el templo celestial de Dios, primero hay que hacerse columna en la iglesia en la tierra.

 

Gran cantidad de hermosas columnas había en el Pórtico Real del templo edificado por el Rey Herodes en Jerusalén para fines del primer siglo antes de Cristo y principios del siglo I de la Era Cristiana. Esta es una escena del modelo creado por Alex Garrard.

 

Gran cantidad de hermosas columnas había en el Pórtico Real del templo edificado por el Rey Herodes en Jerusalén para fines del primer siglo antes de Cristo y principios del siglo I de la Era Cristiana. Esta es una escena del modelo creado por Alex Garrard.

 

III. De hecho, la iglesia verdadera de Jesucristo es el "templo santo" de Dios en la tierra (Efesios 2:211 Corintios 3:16-17), y figuran entre sus elementos arquitectónicos espirituales gran número de fuertes columnas, paradas sobre el único fundamento puesto por Dios, el cual se compone de los apóstoles y profetas, siendo Cristo la piedra principal del ángulo (1 Corintios 3:10-13Efesios 2:19-20).

A. Es de suponerse que cada congregación cuente con columnas. ¿Tiene la suya algunas? ¡Ay de la suya de no contar con al menos una columna fuerte, pues la probabilidad es que pronto se desmorone la estructura!

B. En este mundo lleno de gente caña "sacudida por el viento", en medio del inmenso pantano de mentiras y engaños que cubre casi toda la tierra, yergue un majestuoso templo que es, en su totalidad, "columna y baluarte de la verdad". Se trata de "la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente" (1 Timoteo 3:15). La verdadera iglesia de Dios es "columna y baluarte de la verdad".

1. ¿"Columna y baluarte de" qué cosa"¡…de la verdad!" Qué conste: "…de la verdad", y no de opiniones, sentimientos, tradiciones o teologías religiosas sin fundamento en las Sagradas Escrituras.

2. ¿Qué es la función principal de una columna? Sostener peso, ¿correcto? Embellecer sí, pero su principal función es sostener peso.

3. ¿Qué es la función principal de la iglesia verdadera como columna? ¡Claro! Sostener el peso de la verdad divina. ¿Qué es la verdad? "Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad" (Juan 17:17). ¿Sostiene su iglesia ante el mundo engañoso e incrédulo todo el peso de toda la verdad divina? ¿Es, de veras, "columna y baluarte de la verdad"? ¿De toda la "sana enseñanza" (Tito 1:9; Tito 2:1; 1 Timoteo 4:16) impartida por el Espíritu Santo?

4. En Egipto, Babilonia, Grecia y Roma, las imponentes columnas de grandes templos paganos sostenían las supersticiones de falsas religiones. Por otro lado, en el mundo del presente, no pocas iglesias son "columna y baluarte", no del evangelio puro, sino del "Evangelio Meloso de los Sentimientos Religiosos", del "Evangelio Fatulo de la Prosperidad", del "Evangelio de Señales y Prodigios", del "Evangelio de las Tradiciones".

C. ¿Se identifica usted como "columna" de su congregación? "El hermano Juan es una verdadera columna de la iglesia; también su esposa, la hermana María Luz." ¡Qué elogio más glorioso! ¡Reconocimiento de gran peso y valor! Cada cristiano debe anhelar escuchar semejante encomio respecto a su propia persona.

D. La fabricación de columnas fuertes.

1. Quisiera fabricar unas columnas fuertes para mi casa. ¿Qué me hace falta? Un molde perfecto materiales de primera: varillas de acero, cemento puro, arena, piedra y agua. ¿Qué es el procedimiento? Colocar las varillas, mezclar los materiales, echarlos en el molde, dejarlos fraguar, sacar la columna del molde, pulirla, dejarla curar hasta ponerse dura y resistente.

2. Quisiéramos contar con más columnas fuertes en la "casa de Dios". ¿Qué nos hace falta? Un molde perfecto, el evangelio completoMateriales de primera: carácter, compromiso y voluntad espiritual tan fuertes como el acero; conocimiento y convicción, el cemento puro de los atributos divinos tales como el amor y la paciencia, el agua de vida que es el Espíritu Santo, el cual consolida y hace fraguar los demás elementos. Mezclar bien, echar en el molde, dejarlos fraguar. Sale del molde una columna espiritual. Es preciso que esta nueva columna se cure, poniéndose dura y resistente, antes de que la congregación haga descansar en ella siquiera una parte del gran peso que corresponde a los líderes espirituales.

E. Múltiples columnas pueden sostener mucho peso, y resultan en una estética más impresionante.

1. En la Acrópolis de Atenas, Grecia, el Partenón, en cuya sombra predicó el apóstol Pablo, hermosísimo templo pagano de la diosa Atenea, tenía en su exterior cuarenta grandes columnas dóricas, perfectamente elaboradas, y todavía más por dentro. Todo el peso de arquitrabe, friso alrededor de piedra con sus esculturas de alto relieve, tímpanos de piedra con sus esculturas, cornisas y techo de tejas fue repartido en las columnas.

2. Frente al templo que edificó en Jerusalén, Salomón levantó dos enormes columnas de bronce, de dieciocho codos de alto (veintisiete pies; nueve metros) con una circunferencia de doce codos (dieciocho pies; seis metros). Sostenían el gran peso de dos capiteles de bronce, en formas de lirios, de cinco codos (siete pies y medio; casi dos metros) de alto 1 Reyes 7:13-22 ).

3. Una sola columna solitaria, ¿cuánto peso puede sostener? Es más propensa a inclinarse y caer, por no estar unida a otras columnas mediante amarres entre las cabezas. No es tan impresionante y hermosa como toda una hilera o un cuadro de columnas.

4. Asimismo, en la iglesia: ¡cuán solitaria es una sola columna espiritual en una congregación! Más propensa a inclinarse y caer por no estar unida a otras columnas. Pero, unas cuantas columnas espirituales, colocadas estratégica y armoniosamente, se apoyan mutuamente, fortaleciéndose, aumentándose también la estética espiritual de la congregación.

5. Y ¿su congregación? ¿Cuántas columnas hay en ella? ¿Sobre cuántas columnas se reparte el peso de su congregación? La columna espiritual forzada a sostener demasiado peso puede agrietarse, rajarse, desplomarse, con consecuencias catastróficas para la congregación.

F. Una vez elaborada y colocada en su sitio, se supone que la columna no se mueva jamás ¡ni una pulgada! Llueve, truena, relampaguea, soplan airados los vientos, tiembla la tierra, pasan los años: ¡ahí se queda sobre su basamento sólido, erguida, fuerte, resistente, noble, inconmovible, digna de admiración! Los duros golpes que asestan las furiosas pruebas de la vida destruyen los materiales flojos –cortinas, cuadros, adornos, madera, bloques de manufactura defectuosa, piedras de pobre consistencia- pero no a las columnas de mármol. Sometidas a guerras, conflagraciones, vandalismo y los estragos del tiempo mismo, casi lo único que permanece de muchas edificaciones antiguas son las columnas, como las encontradas en Egipto, Creta, Siria, Turquía y Grecia. Analógicamente, pasadas las tormentas morales y doctrinales que azotan a las congregaciones, casi lo único que permanece en pie son las columnas espirituales, las cuales siguen sosteniendo el peso de la Verdad Divina, pase lo que pase.

1. Columna que se mueve representa gran peligro.

2. Esta anomalía alarmante se está presentando en algunas congregaciones de nuestra hermandad. ¡Sus columnas se mueven! No son totalmente estables, inconmovibles. Ya no están ancladas firmemente en el fundamento seguro de Cristo, su autoridad absoluta y deidad a plenitud. O nunca estaban bien ancladas o se han despegado.

a) Tiemblan las tierras del mundo religioso con sus "movimientos" erráticos, y, enseguida, se despegan las columnas de algunas iglesias de Cristo, moviéndose, tambaleándose.

b) Sacuden los terremotos de "cambios" e "innovaciones", y, enseguida, se despegan las columnas de algunas iglesias de Cristo, bailando locamente al ritmo de las nuevas ondas.

c) ¿Columnas que se despeguen, que se trasladen, que se tambaleen, que bailen? No debo apoyarme en ellas. ¡No me paro ni cerca de ellas! Son muy peligrosas. Ya no sostienen el peso de la Verdad Divina. Opina este servidor que la inmensa mayoría de estas columnas peligrosas pertenezca a la categoría de las columnas que no se curaron suficientemente, colocándose prematuramente en posiciones de gran responsabilidad.

d) ¿Se mueven las columnas de su congregación, aunque imperceptiblemente? ¿Se tambalean? ¿Bailan al ritmo de las nuevas ondas sísmicas creadas por los platos religiosos en contacto violento? ¡Ay de la congregación cuyas columnas se mueven! Se augura para ella inminentes desastres espirituales. Pero, hay remedio, a saber: ¡removerlas, para luego fijar en su lugar columnas bien curadas, ancladas firmemente en el fundamento inquebrantable que es Cristo, su autoridad y deidad.

IV. Invitación.

A. Cerramos, citando de nuevo la elocuente promesa de Apocalipsis 3:11-12 "He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias."

B. ¿Es usted columna fuerte en el templo de Dios? No se despegue ni se mueva para que reciba galardón completo.

C. ¿Es usted columna agrietada, rajada o fácilmente movida? Permita que Cristo le repare y estabilice.

D. ¿Es usted "caña sacudida por el viento"? Cristo quiere transformarle, haciéndole "columna en el templo" de Dios, dándole tres nombres poderosos. A usted le corresponde echar a caminar el proceso de la transformación de "caña" a "columna". Lo puede iniciar en este preciso momento, repudiando la imagen negativa que tiene de su propia persona, deseando ser columna, pidiendo al Señor que le convierta en columna, pasando al frente con el ánimo de invocar su nombre públicamente, luego bautizándose para que Dios comience a obrar en usted su maravillosa transformación.

 

2,778 palabras

 


 

Cursos de capacitación ministerial. Unos cuantos ofrecidos en esta Web. De texto completo. Imágenes-diapositivas para la proyección digital.

Clases bíblicas. Gran cantidad de Guías, Textos para maestros y material in PowerPoint en esta Web.

Sermones. Más de ciento cuarenta en esta Web. De texto completo, audio, video, PowerPoint.

 

  

¿Le gusta esta página? Por favor, ayúdenos a difundir la información por medio de compartirla automáticamente con sus amistades de Facebook, Google+, LinkedIn, y Twitter pulsando en los botones arriba colocados.

Derechos reservados. Permiso concedido para hacer una copia, o múltiples copias pero ninguna para la venta.